La energía solar térmica es la tecnología renovable que más se está instalando en los edificios en España durante los últimos años, con ella podemos conseguir un ahorro energético enorme en el consumo de ACS (agua caliente sanitaría) y en menor medida de calefacción. Nuestras facturas de gas, gasóleo o electricidad nos lo agradecerán.

La entrada en vigor del Código Técnico de Edificación (CTE) y la aprobación del RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios), ha obligado a que todas las nuevas construcciones tengan que contar con el montaje de captadores solares térmicos (comúnmente conocidos como placas solares) y mucha gente se plantea montarlos en viviendas algo más antiguas.

No se deben confundir los captadores solares térmicos con los fotovoltaicos. En la solar fotovoltaica se aprovecha la energía procedente del sol para obtener electricidad; por su parte, la energía solar térmica convierte la radiación que llega del sol en calor, que aprovecharemos para calentar el ACS y para la calefacción de la vivienda. El calentamiento de piscinas también es una opción recomendable.

¿Cómo se consigue? Los captadores solares térmicos captan los rayos de sol y toman su energía para convertirla en calor, mediante el efecto invernadero, que se transmite al fluido primario que se va calentando poco a poco y que aprovecharemos posteriormente. En el régimen de calefacción es mucho menor el ahorro y únicamente es aprovechable (de forma sensible) en caso de sistemas de calefacción de baja temperatura como puede ser el suelo radiante.

En las estaciones más propicias (de abril a octubre) podemos conseguir el 100 % del agua caliente sanitaria de forma totalmente gratuita. Por otro lado, estos captadores con muy duraderos y con un buen mantenimiento duran unos 30 años con lo que se amortizan fácilmente.

Los captadores han bajado su precio en los últimos años y se pueden encontrar sistemas compactos a precios muy competitivos, ahora bien, siempre es preferible un sistema completo de circulación forzada y acumulador independiente.

Y ante la gran pregunta… ¿Y si no hace sol? No pasa nada, el sistema, estando bien dimensionado, guardará el agua caliente cuando haga sol para los periodos en los que no hay. Si, de cualquier manera, ocurriese que se sucedieran muchos días sin radiación solar no debemos preocuparnos ya que el sistema tradicional haría calentar el sistema normalmente, eso sí, ya sin el ahorro que produce el sol.

¿A quién debo llamar si deseo montar ese tipo de instalación? Las empresas habilitadas RITE son las únicas empresas que pueden montar este tipo de instalaciones y registrar ante la dirección General de Industria Energía y Minas la misma.